Ok Computer cumple 20 años de su lanzamiento el día de hoy. El tercer álbum de estudio de la banda Radiohead es, simplemente y sin mucho margen de disidencia entre la crítica especializada, uno de los mejores discos de la historia. Hace 20 años Thom Yorke, los Greenwood y compañía nos dejaban una pieza de arte que rompía los esquemas del típico Britpop imperante y nos esbozaba, en sus líricas y en sus melodías, que el siglo que estaba por comenzar estaría marcado por paranoias, inseguridades, distopías y pérdida de control. A 20 años vista, no creo que podamos decir que estaban muy equivocados en sus profecías.
Por mi parte, ha sido un álbum que he escuchado con regularidad desde hace 20 años, y que hoy todavía escucho. Está asociado a muchos recuerdos en ese tiempo, como cuando lo discerníamos con mi amigo Luis de la Universidad, en su apartamento de El Paraíso cuando íbamos a «estudiar» para algún examen. Recuerdo que fue de los primeros álbumes de mp3 que descargábamos, antes de Napster, desde servidores de FTP macabros en los cuales había que hacer lobby para obtener la clave, y luego de descargarlo, quemarlo en CDs vírgenes para poder escucharlo en el carro o en la casa. Recuerdo escucharlo en momentos de mucha melancolía, o simplemente en tardes de relajación. Podría elegir prácticamente cada una de sus canciones y asociarlas a un recuerdo.
Sin embargo, si me tengo que quedar con un recuerdo y una canción, a lo mejor por lo reciente me quedo con un recuerdo de hace apenas un año. Estando visitando a mi compadre Alejandro en su casa de Seattle, sentado en su cuarto de música, con unas JBL vintage 4343B y en pleno efecto de un Brownie hecho con esencias de Cannabis, decidí poner el acetato de Ok Computer y sentarme a pensar en la vida y en los cambios. En ese entorno, y bajo esa influencia, un disco que he escuchado cientos de veces sonaba como nunca antes había sonado, el punto culminante siendo No Surprises, con sus campanas que simplemente me envolvían de una forma que jamás había imaginado, mostrando frecuencias y armonías que nunca supe que estaban ahí, hasta ese momento. Ese día dejé de fumar oficialmente y emprendí un camino de cambios que aún se desarrollan. Es una guerra a largo plazo, y las batallas son diarias (y no se ganan todas), pero con recordar ese día y esas reflexiones obtengo algo de fuerza para seguir el camino.
A heart that’s full up like a landfill
A job that slowly kills you
Bruises that won’t heal
You look so tired and unhappy
Bring down the government
They don’t, they don’t speak for us
I’ll take a quiet life
A handshake of carbon monoxide
No alarms and no surprises
No alarms and no surprises
No alarms and no surprises
Silent, silent
This is my final fit, my final bellyache with
No alarms and no surprises
No alarms and no surprises
No alarms and no surprises please
Such a pretty house, such a pretty garden
No alarms and no surprises (let me out of here)
No alarms and no surprises (let me out of here)
No alarms and no surprises please (let me out of here)
Yo quiero un poquito de ese brownie
Tu sabes donde se consigue, jeje